Título:
ÉXODO
Categoría:
OBRA LARGA
Autor:
Xavier Vidal de las Heras
Género:
Drama. Road Movie. Thriller.
Edad:
+18
Reparto
Vincent Üllel: Vincent Gallo
Portera: Ana Wagener
Maribel: Maribel Verdú
Novia: Elena Anaya
Novio: Hugo Silva
Camionero 1: Antonio Dechent
Secretaria: Marta Etura
Antonio: Manuel Morón
Enfermera: Verónica Echegui
Manuela Üllel, hermana de Vincent: Manuela Vellés
Marisa, madre de Vincent: Marisa Paredes
Juan Üllel, padre de Vincent: Fernando Guillén
Camionero 2: Antonio de la Torre
Música
(en orden de aparición):
1.
Sonata Nº 2, de Chopin (Movimiento
3 & 4)
2.
La doble vida de Verónica,
de Zbigniew Preisner
3.
Funeral March, de Chopin
4.
Salve Rociera
5.
Lacrimosa, de Zbigniew
Preisner
6.
Sonata Nº 2, de Chopin (Movimiento
1)
7.
Decálogo 3, de Zbigniew
Preisner
8.
No amarás (Decálogo 6), de
Zbigniew Preisner
9.
No amarás (Decálogo 6), de
Zbigniew Preisner
(bis)
10. Sonata
Nº 2, de Chopin (Movimiento 3 & 4) (bis)
11. Largo
en Fa Menor, de Bach
12. Finale
de Tres Colores: Rojo, de Zbigniew Preisner
13. Ton
héritage, de Benjamin Biolay (Títulos de crédito)
Sinopsis:
Vincent inicia un viaje en el que visitará
las partes más oscuras de su pasado. La historia de varios personajes. La
crónica de un personaje en una Semana Santa simbólica. Un viaje de la nada a la
civilización.
Argumento:
Pantalla en negro
Suena
Sonata Nº 2 de Chopin Movimiento 3 & 4 a partir del min. 00:16
Se sobreimprime un título: DIRECTED BY 7 PRESENTA
Junto
a la música, se oyen unos pasos de semana santa.
Sonido
de tambores, primero en la lejanía, luego muy fuerte.
Es de noche. Vemos una multitud alrededor de
una procesión. Una calle estrecha de piedra a rebosar. En la alto, la figura de
una virgen dorada. Al fondo, encapuchados, una comparsa de músicos y gente
llorando. Se oye el sonido de la música, el rumor de la gente y el sonar de los
instrumentos.
Fundido a negro: Se sobreimprime un título: UNA OBRA DE
XAVIER VIDAL
Sigue
Sonata Nº2
De pronto, de entre el gentío vemos la
silueta de un hombre esquivando a la gente con codazos. Desde un plano aéreo
observamos cómo su figura va zigzagueando hasta llegar al final de la gente en
procesión. Al deshacerse de la multitud, vemos su cuerpo en primer plano: es
Vincent (Vincent Gallo). El plano aéreo va
descendiendo mientras Vincent corre, alejándose del gentío. Vincent
corre a cámara lenta hacia la cámara, el sonido de los tambores desciende, la
sonata sigue con fuerza. Vincent acaba la carrera en un primer plano: a cámara
lenta, vemos su cara sudorosa con una expresión de terror.
Fundido a negro: Se sobreimprime el título: ÉXODO
Sonata
Nº 2 finaliza bruscamente en el min. 2:08
En primer plano: Vincent se despierta
asustado. Tiene el pelo y la barba más larga que en el sueño. Su cabeza reposa
en un suelo de tierra mojada.
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: MANUELA
Vemos
la imagen de un sol naranja apareciendo en el horizonte.
Suena
suave La doble vida de Verónica a partir del min. 00:30
Vincent se levanta y empieza a caminar. Está
totalmente desnudo: su aspecto es sumamente descuidado, con una barba larga, un
pelo largo y sucio, mucho bello corporal. Se sucede una batería de imágenes:
vemos a Vincent bañándose en una charca, comiendo los frutos de una planta, meditando,
corriendo con los brazos extendidos en cruz y los ojos cerrados por una
pradera, pasando su mano entre las flores mientras el vello de sus brazos se
eriza en punta, encendiendo un fuego al aire libre con la ayuda de unas piedras
y ramas mientras oscurece.
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: CUARESMA
La
doble vida de Verónica finaliza en el minuto 1:49
Plano
general de un cielo estrellado, con luna llena y sin nubes.
Vincent está tumbado a la intemperie como en
el inicio. De un lado se aprecia la luz y el crepitar de una pequeña hoguera.
Vincent come algo inapreciable que está pinchado en un palo fino a modo de
brocheta. Vincent tira el palo, se tumba, pone sus dos manos en la cabeza a
modo de cojín, respira hondo y mira el cielo de noche. Empieza a hablar solo:
Hola, Manuela.
Volvemos
a ver el cielo en todo su esplendor.
¿Cómo va por ahí arriba? ¿Y mamá? ¿Sabes algo de ella?
Oímos
el ruido de un grillo en la lejanía.
Tengo que contarte una cosa… hoy he soñado algo extraño.
Estaba en una especie de procesión, de esas a las que nos llevaba papá de
pequeños cerca de El Retiro… Pero podía sentir que algo ocurría. Estaba entre
toda esa gente y… no sé… me asfixiaba. Tenía miedo. ¿Crees que los sueños
tienen algún significado, Manu?
Plano
del cielo en silencio. No hay respuesta.
Sí, yo también lo creo. Ya te contaré. Buenas noches,
descansa.
Vincent cierra los ojos. Una pequeña brisa
ondea su cabellera. La misma brisa apaga la hoguera.
Fundido a negro.
Vincent está corriendo entre unos árboles. La
luz es gris y el cielo amenaza lluvia.
Suena
Funeral March de Chopin
Caen las primeras gotas y Vincent acelera su
paso. A cámara lenta, vemos el cuerpo de Vincent moviéndose, a la vez que sus
músculos se tensan y sus genitales se mueven con el ritmo de los pasos.
A ritmo normal, filmando a Vincent desde la
espalda, vemos como el hombre llega a lo alto de una colina. Vemos pequeñas
casas separadas unas de otras, hechas con chapas oxidadas y madera ennegrecida.
Vincent se para delante de una caseta. Primer plano de la lluvia resbalando del
tejado e impactando en el suelo de cemento. El cuerpo delgado y mojado de Vincent
se agacha antes de entrar: en primer plano, vemos un sobre blanco tirado ante
la entrada y con los bordes mojados. En el centro del folio se lee un nombre
escrito a mano con una pluma: VINCENT.
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: PASIÓN
Suena
Funeral March. Minuto 00:54
Ya dentro de la cabaña se oye el sonido de
una tormenta con rayos y truenos. Batería de imágenes: Vincent deja el sobre
con su nombre encima de un taburete de madera, enciende un camping gas, se
sienta en el taburete, empieza a secarse con una toalla sucia, abre un pequeño
armario medio roto y saca un espejo redondo muy pequeño: observa su reflejo en
el cristal.
Suena
Funeral March Minuto 1:16
Con la ayuda del espejo y unas tijeras, medio
iluminado por el camping gas, empieza a cortarse el pelo. Primer plano de
largos mechones cayendo al suelo. Abre el armario al completo: vemos una caja
de juguete oxidada en la que hay algunas monedas. Vemos también un traje negro
y una camisa blanca colgados en una percha. Es la misma ropa que Vincent vestía
en su sueño. Quita la ropa de la percha, se pone la camisa, los pantalones, la
chaqueta y se ajusta el cinturón: la ropa le va muy grande. La luz del camping
gas se desvanece de golpe.
Funeral
March termina bruscamente en el min. 2:02
Fundido a negro.
Es de mañana. Volvemos a ver a Vincent
caminando, pero esta vez vestido, entre el caminito de tierra que dibujan las
casas en ruinas. Se empiezan a oír el sonido de coches pasando a toda velocidad
por la carretera. Vincent mira a lo alto: imagen de un arco iris sobre un cielo
luminoso.
El hombre esquiva una cerca. Se oye la voz de
una mujer (Ana Wagener) con acento andaluz:
-
¿A
dónde vas?
Vincent mira atrás: la mujer sale de una
caseta con un letrero en el que se lee PORTERÍA. No contesta.
Primer plano de la mano de Vincent haciendo
autoestop. Entra en un vehículo, que arranca y desaparece de escena. La cámara
se queda en plano fijo observando el letrero que preside la entrada de la
caseta: CAMPAMENTO HIPPIE - NATURISTA ‘LOS GIRALDILLOS’.
Fundido a negro
Vincent camina al borde de la carretera.
Suenan
los acordes de guitarra de Salve Rociera 00:00 – 00:14
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: MARIBEL
En un plano aéreo, vemos la silueta de
Vincent llegando a un restaurante de carretera, en cuyo aparcamiento hay filas
y filas de camiones.
Vincent entra en el local.
De
hilo musical de fondo, se escucha Salve Rociera desde el min. 00:15
Vincent se sienta en un taburete recostándose
en la barra. Del otro lado, una mujer (Maribel Verdú) se acerca a él mientras
seca un vaso con un paño.
M (con acento andaluz) - ¿Qué va a tomar?
V- Agua.
M- ¿Solo
agua?
Vincent responde que ‘sí’ con la cabeza.
Mientras la mujer le sirve la bebida, Vincent
observa el interior del local: varios camioneros están jugando a cartas
mientras fuman puros, y en el comedor del fondo dos novios (Elena Anaya y Hugo
Silva) y un centenar de invitados bien vestidos bailan la Salve Rociera. La
chica vuelve a acercarse y Vincent coge un periódico.
M (dejando el vaso en la barra y marchándose
al interior de la cocina)- Aquí tiene.
V (alzando la voz) - ¡Espere un momento!
La mujer vuelve tras sus pasos. Mira
fijamente a Vincent mientras él saca la caja de juguete de antes de su
bolsillo, la abre y deja un par de monedas sobre el mármol.
M (sorprendida) – Pero esto no me sirve, señor. Son pesetas…
Vincent la mira con una expresión neutra.
M (dejando las monedas en la palma de su
mano) – No importa. Le cojo esto. Lo
demás es suyo.
Vincent se bebe el agua de un solo trago. La
mujer no puede evitar mirarle.
M - ¿Usted
no es de por aquí, verdad? Lo digo por el acento…
V – Ahora
mismo no soy de ningún sitio.
M - ¿Pero
vendrá de algún lugar, no?
V – No
lo sé.
M – Eso
siempre se sabe… ¿Está de viaje?
V (titubeando)
– Yo…
M (acercando sus ojos a los de Vincent) – Todos los hombres que vienen aquí se dirigen
a algún sitio.
V – A
Madrid.
M - ¡Qué
bien! Yo hace siglos que no voy a Madrid.
Vincent la mira con cara sonriente. Silencio
incómodo.
V (señalando la mejilla de la mujer) - ¿Y eso?
M (mientras esconde el moratón de la cara con
su pelo) – Nada, gajes del oficio…
Otro silencio.
M (suspirando y volviendo a erguirse) – Bueno, pues le dejo. Con la boda estamos
hasta los topes de trabajo, ya se puede imaginar… Si quiere algo me llama y
vengo.
V (de nuevo, antes de que la mujer se marche)
- ¡No sé su nombre!
M (moviendo expresiva las manos) - ¿Yo? (guiñándole un ojo) ¡Maribel!
Vincent se queda solo en la barra.
Sigue
de fondo la Salve Rociera desde el minuto 1:54
Se suceden una batería de imágenes: primer
plano de los novios bailando a cámara lenta, Vincent pasando las páginas del
periódico, la imagen de una televisión emitiendo una procesión de semana santa
sin sonido, un camionero (Antonio Dechent) deja las cartas en la mesa mientras
sus compañeros de juego hacen una expresión de derrota, Maribel sirve copas de
champán en las diferentes mesas del convite…
Sigue
la Salve Rociera en el minuto 2:42
Vincent se queda paralizado mirando el
periódico. Los ‘olé olé’ de la canción se oyen distorsionados de fondo. Leemos
el titular de la noticia en primer plano: EL EMPRESARIO JUAN ÜLLEL SE ENCUENTRA
GRAVEMENTE ENFERMO EN SU RESIDENCIA MADRILEÑA.
Termina
bruscamente la Salve Rociera
Suena
Lacrimosa desde el min. 00:09
Batería de imágenes: Vincent sale del bar y vemos
cómo cae una lágrima de su rostro al suelo. Los invitados aplauden y brindan
por los novios. Vincent salta a lo alto de uno de los camiones del
aparcamiento. Desde lo alto del tráiler, el hombre observa como el camionero (Antonio Dechent) penetra a Maribel en un
rincón del edificio. Maribel llora, y el hombre la abofetea mientras se abrocha
los pantalones y tira un billete de 20 euros al suelo. El camionero se va y
Maribel queda tiritando en el suelo. Plano de la espalda del hombre caminando
en dirección al camión. Plano de Maribel levantándose y tapando con su mano el
hilillo de sangre que sale de su mejilla. Plano de los novios bebiendo champán.
Y finalmente, vemos al hombre subiendo al vehículo en el que estaba montado
Vincent. En un plano aéreo, vemos el camión saliendo del aparcamiento y
saliendo de escena.
Sigue
Lacrimosa
Fundido a negro
Sigue
Lacrimosa en el min. 1:45
Vincent, en lo alto del camión, observa la
ciudad. Se suceden varias imágenes de Madrid de noche: jóvenes bebiendo y
bailando por la calle, un adolescente vomitando en la acera, los servicios de
limpieza y basura recorriendo la urbe, los árboles de El Retiro, carreteras sin
apenas tráfico, fuentes empezando a escupir agua, los primeros comercios
abriendo sus verjas metálicas, las farolas apagándose ante la llegada del día…
Vincent aprovecha una parada del camión y
salta al asfalto. El camión sigue su camino sin él. Mientras se aleja el
vehículo, vemos un primer plano de Vincent sacando del bolsillo de su chaqueta
el sobre con su nombre.
Lacrimosa
termina
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: ANTONIO
Vemos a Vincent caminando por la Gran Vía con
la carta y el sobre en la mano. Vemos el ruido y la rutina de la ciudad en hora
punta. Por su vestuario, Vincent llama la atención de los transeúntes. Se queda
mirando un letrero: INDUSTRIAS ÜLLEL. Llama al timbre.
Estamos en una sala de oficinas.
Suena
de hilo musical la Sonata Nº 2 de Chopin Movimiento 1
Vincent mira a varias secretarias escribiendo
en sus ordenadores, hablando por teléfono y bebiendo café en una sala adjunta.
Se dirige a una mesa con la indicación de RECEPCIÓN. Le atiende una chica
(Marta Etura).
M (con voz amable) – Buenos días, ¿tiene alguna cita concertada para hoy?
V (nervioso) – No, yo… Quisiera hablar con el director Juan Üllel.
M – Me
temo que eso es completamente imposible, señor. El señor Üllel no atiende
visitas…
V (acercándose a la mesa a la vez que coge la
mano de la chica) – Seguro que podrá arreglarlo,
señorita. Entre allí dentro y diga que ha venido el hijo del señor Üllel. ¿Me
entiende?
M (asustada) – Sí, sí, descuide, espérese un minuto… (Entra en uno de los
despachos).
Suena la música. Toda la gente de la oficina
está mirando a Vincent fijamente. Vincent se peina y plancha con la mano el
traje arrugado y medio sucio.
M (mientras abre una puerta de cristal) – Por aquí,
señor Vincent.
En la sala suena la misma melodía de Chopin.
Vincent está sentado en una larga mesa de caoba mientras desde uno de los
ventanales se observa el discurrir de la ciudad. Por la puerta entra un hombre
entrajado (Manuel Morón).
A (sentándose en el extremo opuesto a
Vincent) – Dichosos los ojos…
La secretaria cierra la puerta y se dirige a
una máquina de café.
El hombre hace un gesto para encajar la mano
con Vincent, pero este rechaza el saludo.
A (abriendo una carpeta) – Bueno, no hay tiempo que perder así que…
V (enfadado) - ¿Cómo me habéis encontrado?
A (con expresión seria) – Desde que te fuiste hace doce años te hemos
buscado por todas partes. Tu padre en persona pagó a una comisión de detectives
para dar contigo. No ha sido fácil, pero aquí estás. Si te parece…
V (con expresión muy enfadada, gritando fuera
de sí) – No quiero saber nada ni de mi padre ni de esta puta empresa. Solo he
venido a pedir que me dejéis tranquilo, ¿entiendes?
A (abriendo su pluma dorada) – Las cosas no son tan fáciles, Vincent. Tenemos
que tratar un asunto muy importante. Tú y yo. Ahora.
V (mientras la secretaria le sirve un café) –
Supongo que no puedo negarme.
A – No,
no puedes. (Escribe una cosa en su dossier). Bueno, a estas alturas ya debes saber que tu padre…
V (interrumpiéndole) – No sé nada ni quiero saber. Ya lo he dicho…
A – Tu
padre tiene 86 años y en su estado no puede seguir al frente de la empresa.
Figúrate el riesgo que supone esto para las Industrias Üllel, y más ahora con
la crisis económica.
V (con expresión enfadada) - ¿Y qué tengo que ver yo con todo esto?
A – Pues
muy fácil. Como abogado que soy de tu padre conozco su testamento. Una vez tu
padre muera, tú estarás al frente de las Industrias Üllel.
V – No
lo haré, y lo sabes…
A – Mira,
Vincent… Lo que pasase entre tu padre y tú es agua pasada. Han pasado doce
años, Vincent… Ya no tiene sentido tu actitud de adolescente rebelde. Y a
juzgar por tu ropa parece que necesitas dinero…
V (voz tajante) – Repito: no quiero saber nada de mi padre.
A – Estamos
hablando de la tercera empresa más importante del país. Exportamos a todo el
continente, Asia, América y Estados Unidos. Las empresas Üllel cotizan en
bolsa, son uno de los motores económicos del país… No hace falta que te diga
todo lo que ya sabes. Está en riesgo el trabajo de muchas personas y la
estabilidad de toda la filial. Debes respetar la última voluntad de tu padre.
V – Antonio…
parece que no lo quieras entender. No aceptaré ningún dinero ni ningún cargo.
Nada que se le relacione con las Empresas Üllel.
A – Estamos
hablando de mucho dinero. Serías uno de los millonarios más ricos del mundo.
V – No
quiero nada material. Si esto es todo lo que tienes que decirme me marcho…
Vincent se levanta de la silla en dirección a
la puerta de cristal.
A – Otra
cosa, Vincent. Ya no como abogado de tu padre, sino como amigo de la familia…
V (con expresión de odio) – No eres
amigo de ninguna familia, Antonio.
A (mirando a Vincent) – Sin tu hermana ni tu madre, tú eres el único descendiente directo de
Juan Üllel. No solo te corresponde la dirección de la empresa sino la casa
familiar, todas las fincas, todos los objetos de valor… Todo lo que levantó tu
padre será tuyo.
V – El
cabrón no tendrá ni la decencia de morir de una enfermedad. Eso es lo que más
me jode: morirá tranquilo en su casa, en su cama y con su dinero. Pues sabes
una cosa, ¿Antonio? (cogiendo la carpeta de Antonio) ¡Ojalá os pudráis todos en el infierno! (tira los papeles al
suelo).
Vincent abre la puerta de cristal.
A – No
puedes huir. Y menos de Juan Üllel. Lo sabes perfectamente. Te volveremos a
encontrar, y si es menester te traeremos de vuelta a esta oficina aunque sea a
rastras.
V – Adiós,
Antonio…
A – Te
olvidas algo…
Antonio lanza desde su asiento un juego de
llaves a Vincent.
A – Quizás
hablando con él se te aclaren las ideas.
V – Está
en…
A – Sí…
Vincent asiente con la cabeza y se va.
Antonio y la secretaria se quedan mirando.
La música de Chopin vuelve a sonar con más
fuerza. Vincent abandona el edificio.
La
canción sigue en el minuto 7:15
Fundido a negro
Sigue
la Sonata de Chopin en el minuto 7:16
Vincent se encuentra en un barrio residencial
a las afueras. Está anocheciendo. Abre la verja de una gran mansión. Saca el
juego de llaves de su bolsillo y abre la puerta de entrada. Lo vemos entrar
desde lo lejos.
Termina
la canción
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: JUAN
Vincent escrutina con los ojos un gran salón
de decoración barroca.
Empieza
a sonar Decálogo 3 desde el min. 00:17
Vincent grita: - ¡HOLA!
Se oye la voz de una chica joven: - ¡Aquí arriba!
Mientras suena la música, Vincent sube poco a
poco las escaleras. Vemos las fotos colgadas en la pared: Vincent de pequeño
con su hermana (Manuela Vellés), su madre (Marisa Paredes) y su padre (Fernando
Guillén). Fotos de la familia en El Retiro. La imagen de Vincent de pequeño
vestido de nazareno en una procesión. El pequeño Vincent de pesca con su padre,
sosteniendo con su manita un pez grande mientras sonríe al objetivo. Imagen de
la boda de los padres. Los padres de Vincent jóvenes, besándose. Vincent
adolescente, con un gorro negro en la cabeza, sosteniendo un diploma
estudiantil. Ya en los últimos escalones, observamos la entrada de varias
habitaciones con ‘MANUELA’ y ‘VINCENT’ en la puerta a modo de letras
infantiles. Se oye el ruido de una máquina y el bombeo de un dispositivo
mecánico.
Aparece una chica vestida con una bata blanca
(Verónica Echegui): - Aquí, señor…
Vincent se dirige a la habitación.
Finaliza
Decálogo 3
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: MUERTE
El
ruido de la máquina se hace más fuerte.
Vincent observa a un anciano tumbado en una
cama; y a cada lado, varias máquinas de oxígeno y un gran cableado.
Enfermera: - ¿Le manda Antonio?
V – Soy
su hijo. El hijo de…
E (extrañada) – Ah… Encantada. Nunca habíamos coincidido…
V – Hace
tiempo que no vengo por aquí…
Primer plano del anciano (Fernando Guillén)
abriendo los ojos.
E – Su
padre está muy débil. Si le soy sincera, no creo que aguante más de un par de
semanas. Tiene los bronquios obstruidos y no tiene una buena circulación. La
semana pasada tuvimos que ingresarle por una embolia. Desde entonces está aquí,
en su dormitorio. Antonio se hizo cargo del traslado y los gastos de las
máquinas. Es un anciano afortunado, su padre… Lástima que no tenga compañía…
V – Lo
sé… ¿Sabe? Me gustaría estar un rato a solas con él.
E – Claro,
faltaría más. Estaré abajo por si…
V – No,
mejor que se vaya. Esta noche me quedo yo con él.
E - ¿Está
seguro?
V – Completamente.
Anda, váyase…
E – Bueno,
mañana a primera hora estoy aquí sin falta. En la cocina tiene una indicación
con todas las pastillas que debe tomar. También encontrará mi número de
contacto.
V – Descuide.
Váyase tranquila.
E (quitándose su bata) – Bien…
Empieza
a sonar No amarás
Vincent observa desde la ventana del
dormitorio cómo la enfermera cierra la puerta y la verja exterior. Empieza a
caminar por la casa. Entra en su habitación. Observa pósters de cantantes de
rock, casetes en fila sobre un escritorio limpísimo, su ropa perfectamente
dispuesta en el armario, una bicicleta, álbumes de cromos y una videoconsola.
Varias fotografías con sus padres cuelgan de un cuadrado de corcho.
Suena
No amarás en el minuto 0:44
Entra en la habitación de Manuela. Encima de
la cama perfectamente hecha observa a Manuela (Manuela Vellés) abriéndose las
venas de su muñeca con una cuchilla de afeitar. Manuela tiene una expresión de
dolor y deja un grito que la música ensordece. Vincent llora mientras observa
la habitación: mira una estantería con varias cintas de vídeo y huele la ropa
de Manuela. Plano de barbies y casas de muñecas rotas. La sangre empieza a caer
al suelo y la silueta de Manuela se desvanece.
Suena
No amarás en el minuto 1:33
Vincent está en la cocina. Recoge una cajita
de plástico llena de pastillas perfectamente clasificadas. Sentada en una silla
observa a su madre (Marisa Paredes) mientras bebe un vaso de agua y engulle una
docena de pastillas. La mujer deja el vaso en una mesa. Está nerviosa, toca su
frente y empieza a sudar. Vincent se queda levantado sin decir nada mientras la
cabeza de la madre se balancea y cae en el tapete de la mesa, dejando un
hilillo de espuma por la boca. Vincent extiende su mano para acariciar el pelo
de su madre, pero la silueta de la mujer se desvanece.
Vincent pasa el lindel de la puerta del
dormitorio. Su padre está despierto.
Termina
No amarás
V (mirando el rostro de su padre) – Hola, papá…
El hombre mueve la cabeza, pero el tubo que
conecta su boca con la máquina de oxígeno le impide hablar.
V – Aquí
me tienes. ¿No tienes nada que decirme?
Los ojos del anciano se empiezan a inundar de
lágrimas.
V – Me
he pasado la vida huyendo de ti, pero no
he podido lograrlo. Es imposible huir de tu propia familia. De lo que eres. De
donde has nacido. De esta casa…
Vincent acomoda la cabeza del anciano en un
cojín. Está anocheciendo.
V – Me
arruinaste la vida. Nos arruinaste la vida, ¿sabes? Me pasé años esperando que
sacases el tema, que mamá dijese algo, que nos pidieses perdón a mí y a
Manuela…
El anciano, con una candencia lenta, hace
amagos de mover el brazo.
V – Siempre
pensé que Manuela era lesbiana por tu culpa. El recuerdo de tu polla dentro de
su boca le horrorizaba. Le persiguió hasta el último momento. Aprendió a sentir
aversión por todo lo masculino, a todo lo que viniese de ti. Y yo también. Pero
tú, como siempre, no lo supiste ver. Solo te importaba evitar el escándalo.
Mantener las apariencias, ¿verdad?
Primer plano de la mano del anciano cayendo
casi muerta fuera de la litera.
V (con voz de rabia) – Mira esta casa, papá. Lo tienes todo y al mismo tiempo no tienes nada.
A nadie. Nos perdiste a todos. Por tu culpa.
La mano del viejo se levanta señalando un
lugar de la pared. Vincent quita por un momento el tubo de la boca del anciano.
Juan Üllel suspira en voz baja: ‘Vincent…
Vincent… Vincent…’.
Vincent sigue la indicación, que da a una
caja fuerte.
V - ¿Es
eso lo que te importa? ¿El dinero? Ya veo que no has cambiado nada…
Vincent empieza a tocar los botones de una de
las máquinas mientras el hombre agoniza en la cama.
V – Se
te ve tan frágil… ¿Cómo te sientes ahora? Sin tener el control de todo. Me das
lástima. Y asco. Siempre has sido un cobarde y un egoísta. ¿Te acuerdas cuando
nos llevabas al sofá del sótano? Las cosas han cambiado, papá.
Vincent sale de la habitación: en lo alto hay
una televisión encendida sin sonido con imágenes de una procesión de semana
santa.
Vuelve
a sonar No amarás desde el min. 1:40
Vincent se dirige a un garaje en el que
descansan un par de coches de lujo y una barca vieja perfectamente embalada, la
misma que aparecía en las fotos del pasillo. Coge un bidón de gasolina.
Empieza a empapar las sábanas de la cama de
su padre con gasolina. Sigue esparciendo el líquido por todas las habitaciones:
esta vez en la habitación de Manuela y en la cocina no hay nadie. Coge un
mechero. Empieza a mover la rueda de la caja fuerte sin éxito. El hombre
agoniza en la cama y mueve la cabeza de derecha a izquierda en señal de
negación. Vincent enciende la llama del mechero, pero de golpe lo cierra.
Realiza un último intento: mueve la ruedecilla de la caja fuerte apuntando a
las letras V – I – N – C – E - N – T, y la máquina se abre con un click.
Adentro vemos varios fajos de billetes y una mochila de cuero marrón. Vincent
mete todo el dinero que puede en la bolsa y se la pone en la espalda.
Suena
No amarás desde el min. 2:48
V (mirando fijamente al anciano) – Adiós papá.
Primer plano a cámara lenta del mechero
abierto cayendo al suelo.
La máquina que da cuenta de las constantes vitales
del viejo deja un ‘piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiip’ largo mientras en la pantalla se ve
una línea verde recta.
Termina
la música
Suena
Sonata Nº 2 de Chopin Movimiento 3 & 4 a partir del min. 00:16
Vincent sale corriendo de la casa. A lo lejos
vemos una columna de humo cada vez más intensa. Batería de imágenes: observamos
las luces de la ciudad, Vincent dirigiéndose a un gentío. Mientras Vincent
llora, la gente lo ahoga y aprieta. Empiezan a oírse junto a la sonata el rumor
de la gente y el ruido de varios tambores. Vincent alza la vista y observa la
imagen de una virgen dorada en lo alto de un atril. Vincent consigue deshacerse
de la multitud y vemos la misma imagen del sueño del principio. Suena la misma
música.
Vincent corre a cámara lenta hacia la cámara,
el sonido de los tambores desciende, la sonata sigue con fuerza. Vincent acaba
la carrera en un primer plano: a cámara lenta, vemos su cara sudorosa.
La
música termina bruscamente
Es de noche. Primer plano de la mano de
Vincent levantando un dedo.
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: VINCENT
Un camión para delante de Vincent. Se sube en
el tráiler. El camión se va y desaparece de escena.
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: RESURRECCIÓN
El
camionero (Antonio de la Torre) se enciende un cigarro.
C
(enseñándole una cajetilla, con acento andaluz) - ¿Quieres?
V – No, gracias, no fumo.
El camionero exhala una bocanada de humo.
Enciende la radio. Oímos la voz de una locutora: Se ha producido un incendio en la vivienda del famoso empresario Juan
Üllel. El personal policial se ha presentado en las inmediaciones de la
urbanización Los Rosales y todo parece indicar que…
Vincent cambia la sintonía rápidamente. El
conductor le mira extrañado.
V – Prefiero
escuchar un poco de música. ¿No le importa, verdad?
C – Que
va… Si apenas lo escucho… Hace compañía. Por cierto, no me has dicho hacia dónde
te diriges.
V – Al
sur.
C – Perfecto.
Ambos callan. De la radio empieza a sonar
Largo en Fa Menor de Bach.
Se
oye Largo en Fa Menor de Bach
Batería de imágenes sin sonido, sonando la música de Bach
Vemos
la habitación de Vincent quemándose a cámara lenta: cortinas y sábanas van
prendiéndose poco a poco y el plano se tiñe de rojo y negro.
Vemos
a Antonio sorprendido por el sonido de su teléfono móvil. Se levanta de la cama
y atiende al auricular: ‘¿Sí?...
¿Cómo?... Voy en seguida…’. Se levanta y empieza a vestirse.
Vemos
a Vincent observando el amanecer desde la cabina del camión. Con la mano quita
la escarcha del cristal. Mira nostálgico al horizonte…
Vemos
la secretaria de Antonio sola en su recepción. Saluda a los empleados que
entran a trabajar. Mira su reloj de pulsera. Abre la puerta del despacho de
Antonio: no hay nadie.
El
camión se acerca al restaurante de antes. Vincent hace indicaciones al
conductor: ‘Pare. Me bajo aquí’… Vincent
sale del camión. El camionero sigue su camino, y en un momento deja de mirar a
la carretera y se fija en el sillón del copiloto: sobre la butaca hay un fajo
de billetes.
Vemos
a los novios de antes levantándose de su cama. Ambos se besan y encienden la
televisión: en la pequeña pantalla, una reportera aparece en primer plano cerca
de lo que parece una casa quemada.
Vemos
a Maribel limpiando la barra del bar, barriendo el suelo, poniendo los platos
en su sitio y ordenando mesas y sillas. En el suelo todavía quedan los restos
de la boda. Abre la reja de la entrada, y en el primer escalón encuentra una
mochila de cuero con una nota escrita: ‘Gracias
por el agua. Cuídate’.
Vemos
a la enfermera llegar a la casa de Juan Üllel. Asustada, mira la casa hecha
escombros y cenizas. Alrededor suyo vemos dos camiones de bomberos y varios
periodistas con micrófonos y cámaras. Un grupo médico introduce una litera con
un cuerpo cubierto con una manta en una ambulancia.
Vemos
a Vincent llegando al campamento mientras la portera lo saluda desde su caseta
con la mano.
Y
finalmente, los dos camioneros llegando a su destino: uno cruzando la frontera
con Francia, otro llegando a la costa. Ya es de día: en primer plano, vemos un
sol de mediodía que ilumina el plano en un blanco transparente.
Acaba
Largo en Fa Menor de Bach
Vincent está tumbado desnudo en la tierra.
Como en la segunda escena, vuelve a hablar solo mirando el cielo estrellado.
Hola, Manuela. ¿Ya has visto a papá?
Silencio.
Espero que puedas perdonarme. Necesitaba quitarme este
peso de encima. Es la última vez que me dirijo a ti. He decidido iniciar una
nueva vida. Empezar desde cero. Sabes que te quiero y que nunca me perdonaré
por no haberte ayudado. Te quiero, Manuela. Dale recuerdos a mamá y a papá…
Vincent
no puede acabar el monólogo. Se levanta de golpe llorando y desaparece de
escena.
Fundido a negro
Empieza
a sonar Finale (Tres Colores: Rojo)
Vincent está en su caseta. Se viste con la
ropa sucia de antes. Pone los pocos objetos que conserva en una bolsa: el
espejo roto, la caja oxidada y otros enseres.
Sale de la caseta y mira al cielo resplandeciente.
Se dirige a la caseta de la entrada.
Portera -
¿Te vuelves a marchar?
V – No.
Esta vez es para siempre.
Portera –
Menuda sorpresa. ¿Y eso?
V – Es
una larga historia.
Portera – Eras
la última persona del campamento. Supongo que ya no me ata nada aquí.
V – A
mí tampoco.
Portera – ¡Que
vaya muy bien, chico!
V (gritando a lo lejos y despidiéndose con
las manos) - ¡Igualmente!
Finale suena en el min. 1:19
Vemos a Vincent haciendo autoestop en la
carretera. La escena del capítulo anterior se repite, pero esta vez Vincent
camina en la otra dirección de la carretera. Por la carretera no aparece ningún
coche. Vincent camina. En plano fijo, vemos su silueta alejándose… hasta
perderlo de vista. El plano resta fijo, ya sin más imagen que una carretera
desierta.
Termina
Finale
Fundido a negro. Se sobreimprime un título: ÉXODO
Suena
Ton Héritage de Benjamin Biolay hasta el final
Aparecen
los títulos de crédito.
FIN
Notas finales al lector:
-
La obra sucede en el orden
en el que se escribe y corresponde a hechos ficticios.
-
La obra está hablada en
español y sucede en Madrid y en la costa andaluza.
-
La obra sucede a partir del
Jueves Santo de Semana Santa, una coincidencia que debe respetarse para la
comprensión de la obra.
-
En la mayoría de lugares en
los que sucede la historia hay una televisión con imágenes de procesiones.
-
¡Lean la letra de la canción
final! Ton Héritage (Tu legado) tiene
un mensaje relacionado con la obra.
-
Éxodo
es un libro de La Biblia en el que se
cuenta la salida del pueblo hebreo de Egipto, su huida y la búsqueda de la
Tierra Prometida. Ese es en parte el recorrido vital de Vincent.
-
La Semana Santa viene
precedida de la Cuaresma, y se compone de la conmemoración de la Pasión, la
Muerte y la Resurrección de Jesucristo.
-
El movimiento hippie nació
en Estados Unidos en los años 60 ligado a unas ideas políticas y culturales de
libertad y desenfreno. El ideal hippie es un hombre con el pelo y las barbas
largas, como Vincent al inicio de Éxodo.
El movimiento perdió fuerza en los 80 y se mantiene en algunas comunas llamadas
‘ecoaldeas’. Históricamente se ha relacionado lo hippie con una música rock
psicodélica y una idea de amor y libertad, aceptación sexual, vida en grupo y
alabanza al nudismo. Las ecoaldeas están viviendo un nuevo boom con motivo de
la crisis, son comunidades sostenibles, independientes y ecológicas, propugnan
una vuelta al estado natural del hombre, rechazan cualquier ejemplo de
tecnología y están en contra del capitalismo. Todo ello está en la actitud de
Vincent.
-
Actualmente ‘nudismo’ y
‘naturalismo’ se consideran sinónimos. El movimiento se fundamenta en un culto
al cuerpo desnudo y defiende la actividad de ejercicio físico sin ropa, a la
intemperie y sin fines competitivos. Propugnan una dieta vegetariana, algunos
son crudívoros. En España hay muchos campamentos o poblaciones naturistas,
sobre todo en la costa, y la mayoría funcionan como campings de verano. Muchos
consideran estos grupos como sectas por su uso de la medicina alternativa y su
flexibilidad con las drogas. Éxodo
nació entre otros propósitos de la idea de intentar explicar qué puede motivar
a un individuo a entrar en uno de estos campamentos (y también qué puede
hacerle marchar de dicho lugar).
-
En el libro del Génesis Adán y Eva viven desnudos en el
Jardín del Edén comiendo las frutas de los árboles. La desnudez simboliza
históricamente la pureza, y el cubrimiento con la ropa marca la necesidad de
taparse por la presencia del pecado. Todo ello está en Éxodo.
-
Agradezco
enormemente la ayuda de Mayra Meza, Miguel Martín y Núria Sancho.
-
¡Muchas
gracias por leer todo esto! Espero que les haya gustado.
Sin duda una historia bien trabajada, con un argumento muy interesante y simbólico, y una narrativa muy propia de Xavier que la hace disfrutable, la descripción de los personajes y las situaciones muy bien planteadas, la música muy bien escogida.
ResponderEliminarEn resumen gran trabajo del señor De las Heras!
Saludos! :)
Hola, obra muy interesante y muy bien estructurada. Un notable trabajo de dirección. El personaje principal muy bien tratado. Me ocurrió que viendo las notas finales pude apreciar más el sentido simbólico de la obra. Pero muy buena obra, me gustó mucho y la disfruté. Muchos saludos
ResponderEliminarInteresante obra, con un tono bastante oscuro y profundo, el protagonista es lo mejor, su trama se intuye pero lo interesante es el vuelco de emciones que provoca. Algunos secundarios me sobraron, pero sin duda la obra es robusta y solida.
ResponderEliminarOtra excelencia de unos de los grandes de festival.
Felicidades!
¡Estupenda obra! De las que he leido creo que es la que tiene una mejor dirección, si cabe el término. Es una especie de trajedia griega moderna donde se habla de la soledad y las funestas consecuencias de un pasado turbulento. Una especie de redención. Me parece excelente el título y el personaje principal.
ResponderEliminarY la musica muy bien escogida. Lo único que le critico es que haya tenido muchos personajes que ni al caso van. De lo demás solo decir: ¡Felicidades! Gran trabajo.
Vivi.
Concuerdo con los demás, me ha gustado mucho. La música hace que sintamos la historia y eso es muy bueno. Y creo que Vincent es el mejor personaje del festival de momento, seguro es nominado y posible ganador de su categoria, aunque es muy pronto para decirlo.
ResponderEliminarMe estuve leyendo obras anteriores de Xavier, y es realmente muy bueno para los dramas, esta obra me recuerda un poco a Frozen, claro son muy diferentes, Exodo utiliza muchos simbolismos y eso es grandioso.
Saludos.
Bueno, de lo ya dicho, poco más queda por añadir. Simplemente me gustaría remarcar dos cosas: la canción del final, gran elección, y siguiendo el tono que ha llevado la obra en todo momento; y las escenas mientras Vincent recorre la casa son muy evocadoras y precisas... y precisamente la de la hermana me ha dejado helado.
ResponderEliminarUn gran trabajo, sí señor. Enhorabuena
Me gusta mucho el personaje de Vincent y Maribel, los otros se podrían haber redondeado un poco más. Buena ambientación para una historia que va de menos a más.
ResponderEliminarLas historias de venganza siempre funcionan.
Saludos ;)
Simplemente, estupenda. Xavier Vidal es uno de los grandes, con mayúsculas y muy bien merecido. Cada uno de sus trabajos es excelente, y "Éxodo" no se queda atrás. Vincent es, desde ya, un personaje para la historia del DB. Me ha fascinado, un guión muy bien trabajado y una ambientación sensacional. La música, hombre, es deliciosa.
ResponderEliminar¡Muchas felicidades, Vidal!
Siii, me gustó!!! jajaja En seriooo, me gustó todo ese armado con doble sentido, y la historia en si, también. Tiene escenas sumamente bellas, el inicio que luego se repite, es super, que bien retratado!!!
ResponderEliminarFelicitaciones ;))) ahora entiendo porqué tiene tantas nominaciones :D